
Ingredientes:
350 gramos de harina
175 mililitros de agua tibia
1 huevo
45 mililitros de aceite
7 gramos de levadura seca
1/2 cucharadita de sal
Preparación:
Echar la harina en un bol y formar un volcán. En el centro, agregar la levadura, la sal, el agua, el aceite y el huevo. Amasar hasta tener una pasta homogénea.
Hacer una bola y pasarla a una mesa de trabajo espolvoreada con harina.
Amasar por cinco minutos, estirando la masa hacia adelante y doblándola para que se esponje.
Hacer nuevamente una bola y llevarla a un recipiente previamente enharinado. Tapar con un paño y dejar reposar de media a una hora, hasta que haya crecido lo suficiente.
Una vez lista, estirar con un rodillo hasta que tenga un centímetro de grosor. Colocar luego un vaso o una taza sobre la masa para hacer los pancitos. Lo que vaya quedando de masa se vuelve a estirar y se repite el proceso. Cuando sea solo un poco, se hace un pancito con las manos y se aplasta.
Poner los pancitos en una bandeja forrada con papel encerado, taparlos y esperar 30 minutos.
Llevar una sartén antiadherente al fuego y colocar los pancitos, cuidando de que haya suficiente espacio entre cada uno.
Tapar y cocinar por cuatro minutos a fuego lento. Pasado ese tiempo, voltear y dejar otros cuatro minutos. Darles vuelta nuevamente y cocinar dos minutos por cada lado.
Pueden servirse tanto tibios como fríos y se conservan perfectamente durante algunos días.
Fuente / cocinayvino.com/