
INGREDIENTES
4 PERSONAS
400 g de tomates
1 diente de ajo asado
100 g de miga de pan seco sin corteza
90 g de aceite de oliva
100 ml de agua mineral
Vinagre de Jerez al gusto
Sal
PARA DECORAR
2 huevos duros
20 g de jamón ibérico
Unas tiras de cebollino
Aceite de oliva virgen extra
PREPARACIÓN
1
Lavar los tomates, retirarles la parte del tallo y, con un cuchillo, hacerles un corte superficial en la parte inferior en forma de cruz. Introducirlos en una cazuela con agua hirviendo, dejarlos unos segundos y retirarlos. Luego, enfriarlos bajo el agua del grifo y pelarlos.
2
Disponer los tomates en el vaso de la trituradora, agregar el diente de ajo, la miga de pan, el aceite de oliva, el agua, el vinagre y la sal y triturar hasta que quede un salmorejo cremoso. Rectificar si es necesario, añadiendo más pan seco o más agua, según haya sido el resultado. A continuación, rectificar el punto de acidez y de sal. Pasar por un colador chino y reservar en un lugar frío.
3
Verter el salmorejo en un cuenco y acompañarlo con el jamón ibérico cortado en daditos muy pequeños (tipo brunoise) y el huevo duro picadito. Decorar con un poco de cebollino picado y una lágrima de aceite de oliva virgen extra.