El quinoto es una fruta pequeña, de sabor cítrico y un punto amargo muy característico que, cuando se cocina en almíbar, se transforma en un manjar que atraviesa generaciones. Es común encontrar frascos de quinotos en almíbar en las alacenas familiares, listos para acompañar postres o disfrutarlos con una tostada.
Esta receta es ideal para aprovechar la fruta de estación y conservarla durante meses sin perder sabor ni textura. Prepararlos en casa es más fácil de lo que parece y el resultado final supera ampliamente a cualquier versión industrial.
Receta de quinotos en almíbar
Ingredientes:
1 kg de quinotos frescos
800 g de azúcar
1 litro de agua
1 ramita de canela (opcional)
1 clavo de olor (opcional)
Frascos de vidrio esterilizados
Preparación:
Lavá bien los quinotos, eliminá las impurezas y pinchalos con un palillo o palito de brochette (esto evita que revienten y ayuda a que penetre el almíbar).
Hervilos en agua durante 5 minutos. Colá y repetí este paso dos veces más para reducir la acidez y el amargor.
Prepará un almíbar con el azúcar y el litro de agua. Herví durante 10 minutos hasta que espese un poco.
Incorporá los quinotos al almíbar y cociná a fuego medio por unos 30 a 40 minutos, hasta que estén tiernos y brillantes.
Si querés, agregá la ramita de canela o el clavo durante la cocción para darle un toque especiado.
Envasá en caliente en frascos esterilizados, cerralos bien y colocalos boca abajo hasta que enfríen.
